jueves, 20 de octubre de 2016

EL MARINO (II)

 

Saludos.

No hay mucha literatura de los primeros años de Paco Palomares (salvo la que pueda conservar su familia) y como no trato de escribir una biografía del personaje, nos contentaremos con los documentos a los que es posible acceder públicamente y que son, sorprendentemente, abundantes. Serán pinceladas de una vida plagada de sucesos (unos felices y otros menos) con las que trataré de mostrar a un sevillano singular y si me apuran, excepcional.

clip_image002No obstante lo anterior y siendo todavía bastante joven, parece que ya apuntaba formas y maneras. Si atendemos a las referencias de terceros y las diversas fuentes externas, como decía, su pasión marinera fue fomentada por su padre para, al parece, "distraerlo" de otras aficiones. En el diario "El Día" de Madrid, edición del 18 de noviembre de 1910, el gacetillero Enrique Casal escribe toda una columna en la que hace una descripción del personaje muy significativa. Entre otras muchas cosas, dice Casal:

"...Y Palomares colgó su espada y su uniforme momentáneamente; abandonó los barcos y con ellos su corbeta Príncipe de Asturias -una corbeta que hubieron de comprarle sus padres para que olvidara otras aficiones- y comenzó a dedicar su actividad al cultivo del teatro..."

¿Otras aficiones? Pues a tenor de lo que podremos leer más adelante, deberemos imaginar que el toreo y el teatro debieron ser las más importantes. No obstante, su actividad marinera dio también mucho de sí.

Pero volvamos a las primeras noticias que poseemos. Muy joven cursó estudios y se convirtió en Capitán de Marina, como vemos, profesión que le permitió satisfacer en parte sus ansias de aventura a bordo de su corbeta.

Sin embargo, en 1895 y con apenas 21 años, andaba iniciándose en el arte de Cúchares. En una reseña del Semanario "El Arte Andaluz" del 24 de junio, aparece en una novillada celebrada en el coso de La Maestranza, compartiendo cartel con otros cinco futuros diestros.

Dice la crónica que uno de los varios espontáneos que saltaron al ruedo resultó gravísimo (cornada en el pecho que interesó pleura y pulmón) y que se temía por su vida.

Nuestro hombre (que sale a lidiar el quinto) sufre una cogida en el tercio superior del muslo izquierdo, de pronóstico reservado, en una tarde bastante accidentada para espadas y "capitalistas" (espontáneos) con abundantes revolcones y puntazos, repartidos generosamente entre "profesionales" y "amateurs".

clip_image004¿Era ésa la peor pasión por la que temiera su señor padre, el Reverendo Palomares García? Nos tememos que no. Pero aparquemos de momento los toros y la navegación (los retomaremos con creces mas adelante) y abramos una nueva perspectiva en la vida de nuestro fenómeno porque como lo describía en el artículo anterior, llamarlo "polifacético" será un adjetivo perfectamente adecuado.

Republicano y comprometido socialmente de diversas maneras (eran tiempos especialmente revueltos en España, que acababa de perder todas sus colonias de ultramar, y soportaba malamente y a trompicones que desde Europa llegaran nuevos vientos sociales, vendavales, con las ideas de izquierdas ganando terreno rápidamente) parece que, si atendemos a la prensa de entonces, sus actividades, además de la navegación y los astados (de momento) pudieron haberle ocasionado no pocos problemas. Miren esta entradilla:

clip_image006

"Detención de un sospechoso" y se nos encienden las alarmas porque pensamos que si aparece por aquí será por algo y que como andamos tras las pistas de nuestro Paco, hay que seguir leyendo.

En efecto, El Marino tuvo otras complicaciones por sus "ideas avanzadas". El 28 de marzo de 1906, varios periódicos publican una llamativa noticia dando cuenta de la alarma que un supuesto complot anarquista provoca en Sevilla, dos días antes de una de las innumerables visitas del Rey (recordemos que el Borbón era "cliente" habitual de la Real Venta de Pilín, junto al Tiro de Pichones y el Hipódromo de Tablada, donde solía "expansionarse" y "solazarse" con regularidad, además de derribar palomos jóvenes a escopetazos). Pues las noticias señalan que tres individuos alquilaron una habitación amueblada por unos días. Primero desapareció uno y los otros, al poco, pagaron el alquiler y se marcharon igualmente, dejando abandonada una maleta "sospechosa" que, dijeron, volverían a recoger más tarde.

Pasado el tiempo y sin dar señales de vida de dichos individuos, la propietaria de la vivienda dio cuenta a la policía. Inspeccionada la maleta, los agentes informan...

clip_image008

El asunto parece grave y por ello, el Gobernador Sr. López Ballesteros pone el asunto en conocimiento del ministro de la Gobernación Sr. Álvaro Figueroa y Torres Mendieta, Conde de Romanones, que ordena que se haga cargo de la investigación la Guardia Civil. Como consecuencia de las indagaciones previas, el Capitán Vivar informa de la detención de un sospechoso.

clip_image010

La dueña de la vivienda lo identifica. Pero ésa es la versión, incompleta, de El Imparcial.

Atendamos ahora a la que ofrece ABC porque se observan diferencia sustanciales entre reseñas y cronistas. Además, éste diario hace una reconstrucción muy oportuna y completa de los hechos y nos muestra otra faceta más de Paco:

clip_image012

Lo de "sainete" estará perfectamente adecuado. En una larguísima exposición a dos columnas, el periódico de Madrid (no se editaría en Sevilla hasta octubre de 1929) narra la que sería supuesta evolución de los acontecimientos de la maleta, las bombas y el posible atentado. Y las secuelas de todo ello, dedicando al caso dos columnas.

clip_image014

Hasta ahora, sabíamos el asunto maleta y bombas pero ABC nos da una versión ligeramente distinta y conocemos, además, otro dato nuevo: corresponsal del periódico La Gazette de París. Guardaremos éste apunte porque estará relacionado con la profesión.

Como podemos leer, la descripción de los hechos empieza a diferir. Interrogado más tarde, Paco manifestaría que "arrastrado por una vocación irresistible, se dedica desde hace años a investigaciones policíacas y que aspira a un cargo en la ronda del Rey (policía)". Para justificar esto, teje una elabora historia detectivesca que es, cuando menos, llamativa.

clip_image016Los hechos, a medida que avanzan las investigaciones y se van conociendo las declaraciones del detenido, se enredan y se muestran cada vez más incongruentes. El Capitán Vivar mantiene contacto directo con el Conde de Romanones, al que informa regular y puntualmente de los acontecimientos.

El cronista insiste en lo descabellado que resulta todo esto y telegrafía a Madrid que: "el pretendido complot resulta un ridículo sainete". Más adelante, insiste: "Continúan las indagaciones sobre el risible encuentro de las bombas". Tomada ésa primera declaración, Paco es puesto en libertad. Sin embargo, un poco más tarde es detenido de nuevo y vuelto a declarar ante el Juzgado de la Magdalena, constituido en el despacho del Gobernador (!).

clip_image018

Se analizan las bombas, que no estaban cargadas, y se informa que se tratan de artefactos del sistema Nordenfield, de tiro rápido, fáciles de comprar en las tiendas de hierro viejo de Cádiz y de uso habitual en la marina de guerra.

De igual manera, el cronista señala algo en el pasado de Paco que trataremos más adelante: estuvo preso en las kábilas marroquíes. Por último:

clip_image020

Pues si, en efecto, parece un sainete y muy propio de él, precisamente, porque sobre ellos escribirá bastante. La conclusión del asunto bombas según ABC y La Época:

clip_image022

clip_image024

No he podido averiguar qué castigo recibió, si fue multado o condenado a prisión, aunque lo más probable es que se saldara con una multa.

Continuará.

Cuidaros.

 

 

Fuentes:

Moreno Martínez, Doris "El primer museo de la Inquisición en Sevilla". Universidad Autónoma de Barcelona

http://angelaysevilla.blogspot.com.es/

http://hemeroteca.sevilla.abc.es/

http://www.anglicanos.org/

http://iglesiadesanbasilio.blogspot.com.es/

http://protestantedigital.com/

http://gestauro.blogspot.com.es/

No hay comentarios: